Si hay alguien que sabe cómo se debe recorrer una carrera es David Ortiz. El dominicano se convirtió el año pasado en apenas el cuarto jugador dominicano en llegar a Cooperstown por su carrera y desde hace años es una de las figuras principales dentro de una larga historia en donde se pueden apreciar nombres como Babe Ruth, Ted Williams y Roger Clemens.
Luego de retirarse, el “Big Papi” se ha mantenido como un hombre sumamente ocupado en el mundo de los negocios, pero siempre tiene tiempo para velar por el equipo que lo hizo grande, Boston Red Sox. En su última aparición durante los campos de entrenamientos del conjunto, Ortiz habló de la relación que quiere tener con Rafael Devers, el antesalista estelar del equipo que acaba de firmar un contrato por once años y 330 millones de dólares.
“Quiero estar más involucrado con él (Rafael Devers), por mi experiencia y por ser un compatriota dominicano. Él es la cara de la organización, la cara de la franquicia. Entonces, en algún momento, necesitas aprender a cómo llegar hasta ahí. Es por eso que la organización quiere asegurarse de que pase (estar más involucrado)”, expresó Ortiz, quien fue por muchos años la principal figura del equipo y uno de los bateadores zurdos más temidos de las Grandes Ligas, en la misma forma en que hoy lo es “Carita”.
Al referirse a las expectativas que hay sobre Devers con su nuevo contrato, Ortiz se mostró confiado en que el joven jugador estará a la altura de las mismas y podrá cumplir con ellas sin problemas.
“Por la manera en la que somos criados para ser jugadores de béisbol en Dominicana, tu prioridad es jugar béisbol. Eso es lo más importante. Su mentalidad es como la de un niño, le gusta salir a divertirse y jugar”, agregó el inmortal de Cooperstown.
En seis temporadas junto a los Red Sox, Rafael Devers batea para promedio de .283 con OPS de .854, 139 jonrones y 455 remolcadas, así como un OPS+ de 124, dos invitaciones al Juego de Estrellas de las Grandes Ligas, un Bate de Plata y ha sido candidato al premio de Jugador Más Valioso en tres ocasiones.