Klay Thompson apareció en su mejor forma al convertirse en la figura sobresaliente de Golden State Warriors durante el triunfo del lunes sobre Phoenix Suns por 123-112 en el Chase Center de San Francisco.
La del escolta fue una actuación necesaria para el vigente campeón de la NBA, ya que de este modo se afirma en puestos de playoffs con marca de 36 ganados y 33 perdidos en el 5º escalón de la Conferencia Oeste.
El nacido en Los Ángeles se mostró con la mano caliente desde el inicio del partido y coronó una noche destacada al finalizar con 38 unidades, 14 de 23 en tiros de campo, de los cuales 8 de 14 fueron desde el rango de los tres puntos.
Stephen Curry se plegó a Thompson al estar casi el mismo tiempo en cancha (poco más de 33 minutos), aunque terminó con 23 tantos. Igualmente, su eficacia también fue positiva con 7 de 13 desde el campo, 4 de 6 en triples y 5 de 6 en libres. Por su parte, Jordan Poole saltó desde el banco de suplentes para colaborar con 20 puntos.
El conjunto de Arizona volvió a sentir la ausencia de Kevin Durant, quien es baja por lesión, y no alcanzó la tarea de sus estrellas: Devin Booker logró 32 tantos, Deandre Ayton firmó 27 y 12 rebotes, mientras que Chris Paul consiguió 11 puntos e igual cantidad de asistencias.
El siguiente compromiso de los Warriors será el miércoles en casa de Los Angeles Clippers, en un duelo ante un rival directo, que se ubica 6º en el Oeste también con récord de 36 33.
