Solo dos partidos han sido suficientes para que Victor Wembanyama establezca diferencias entre el baloncesto europeo y la NBA. «La pista es más abierta, el juego es más rápido, pero es menos física», puntualizó a los medios estadounidenses.
La opinión del pívot de los San Antonio Spurs en cuanto al juego físico llama la atención y seguro más de un jugador experimentado ha tomado nota al respecto. Muchos de sus colegas van a querer probar que está equivocado y darle la «bienvenida» a la liga lo más pronto posible. Ya el centro de los Charlotte Hornets, Kai Jones, le volcó la pelota por encima de sus 2,26 metros de altura y seguramente otros quieren seguir ese camino.
El francés terminó su participación en la Liga de Verano con los texanos. En Las Vegas tuvo un debut irregular, sobre todo en la ofensiva, al fallar 11 de 13 lanzamientos de campo y acumular nueve puntos, pero en el siguiente encuentro respondió con 27 tantos. En total promedió 18,0 unidades, 10,0 rebotes y 4,0 bloqueos.
El centro ha tenido un adelanto de lo que le espera en la 2023-2024 y sacó otras conclusiones: «Me hacen muchas faltas personales, aunque no tantas. Aquí los jugadores vuelan, de donde vengo se juega más en el piso, con grandes box outs. Aquí hay grandes atletas, los mejores del mundo con mucho talento. Pero me gusta más esto», admitió el jugador con experiencia en la liga de Francia y la Euroliga.
