El base de 33 años ha dejado de seguir a la cuenta de la franquicia de Oregón en Instagram, y los principales equipos que buscan su fichaje se han vuelto a poner manos a la obra
Damian Lillard, después de que en las últimas semanas se hayan estancado las negociaciones de su salida de Portland Trail Blazers, ha dado un paso que ha reavivado las especulaciones sobre un posible traspaso. La noticia ha sacudido a los aficionados y ha generado aún más incertidumbre en torno al destino del jugador estrella de la franquicia de Oregón.
En una acción de última hora a través de sus redes sociales, Lillard ya no sigue la cuenta oficial de Instagram de los Blazers. Este movimiento llega en un momento en el que los Rumores NBA de su deseo de ser intercambiado a otro equipo se habían estancado hasta el punto que se creía que el jugador iba a comenzar la temporada, o al menos el training camp, vistiendo todavía la camiseta de Portland.
Aunque Lillard ha sido claro en su anhelo de explorar nuevas oportunidades en la liga, hasta ahora ha continuado defendiendo los colores de los Blazers, el equipo que lo seleccionó y donde ha dejado una marca imborrable. Sin embargo, su deseo de vestir la camiseta de Miami Heat, los actuales campeones de la Conferencia Este, ha sido un tema recurrente en los rumores de la NBA.
Es innegable que la situación es compleja. Por un lado, Lillard sigue bajo contrato con los Blazers hasta la conclusión de la temporada 2024-25 de la NBA, habiendo ejercido su opción de jugador por un monto significativo. Esto brinda a Portland una posición ventajosa para mantener al jugador en su plantel, y para tomarse con toda la calma que considere su traspaso.
Por otro lado, la señal emitida por Lillard al dejar de seguir la cuenta de Instagram de su propio equipo podría ser interpretada como un paso más en la dirección de su deseo de cambio. Aunque el momento exacto en que Lillard tomó esta decisión no está claro, no puede ser ignorado en el contexto de su conocida solicitud de traspaso.
Portland, con la sartén por el mango
La gerencia de los Blazers enfrenta una encrucijada. A medida que los rumores vuelven a ganar fuerza y el deseo de Lillard se mantiene evidente, las decisiones que tomen tendrán un impacto tanto en el futuro del equipo como en la carrera del talentoso jugador. La organización de Portland posee el control de la situación, y el destino de Lillard está en sus manos.
