Mermado por las lesiones, Eden Hazard puso fin a una trayectoria de 16 años marcada por grandes éxitos a nivel de clubes y una promesa incumplida como parte de la “Generación Dorada” de Bélgica.
Muy admirado, Hazard se había retirado de la selección luego que su veterana generación quedó eliminada en la fase de grupos de la Copa Mundial de Qatar a fines del año pasado.
“Debes escucharte a ti mismo y decir basta en el momento adecuado”, dijo Hazard, quien había estado sin club desde que su contrato con el Real Madrid expiró en junio. “Pude hacer realidad mi sueño. Jugué y me divertí en muchas canchas alrededor del mundo”.
Hazard ganó ocho trofeos con el Madrid, incluyendo la Liga de Campeones y dos Ligas de España. Pero su paso con el club merengue fue todo un calvario de lesiones. Sufrió una fractura en el pie derecho durante su primera temporada, lo cual coincidió con el comienzo de su declive.
Tras debutar profesionalmente con el club francés Lille, donde consiguió el doblete liga-copa, Hazard fichó con Chelsea en 2012. Cumplió siete temporadas en Stamford Bridge, convirtiéndose en un ídolo de la afición del club de Londres al marcar 110 goles en 352 partidos.
Además de los dos títulos de la Liga Premier, también salió campeón dos veces con Chelsea en la Liga Europa y alzó una vez tanto Copa FA como la Copa de la Liga inglesa.
“Durante mi carrera tuve la suerte de conocer a grandes entrenadores, directivos y compañeros de equipo — quiero agradecer a los clubes por los que pasé: LOSC, Chelsea y Real Madrid; y obviamente agradecer a la federación nacional por llevarme a la selección belga”.
A nivel internacional, Hazard debutó con la selección en 2008 cuando tenía 17 años. Totalizó 126 partidos y anotó 33 goles.
