Presente y pasado de la defensa del Real Madrid confrontaron el pasado sábado en el Sánchez Pizjuán. Sergio Ramos no titubeó a la hora de defender sus intereses, a pesar de tener enfrente al club de toda su vida. Esta vez le tocó en el saque de esquina con Rüdiger, otro de esos jugadores que no negocia el esfuerzo en el terreno de juego. Un choque de trenes con desenlace esperado.
Toni Kroos, compañero de ambos en diferentes etapas del Real Madrid, habla ahora de la situación que pudo costarle a Rüdiger disputar El Clásico: "Ramos le pintó una sonrisa en la cara a Rüdiger. Se puso caliente la cosa". El alemán estaba apercibido con cuatro tarjetas amarillas y tuvo que contenerse para estar disponible en Montjuic contra el Barcelona.
El próximo fin de semana hay Clásico y por eso, Rüdiger se frenó. De lo contrario, hubiese sido aún más divertido", bromeaba un Toni Kroos que vio la disputa entre ambos centrales desde dentro del terreno de juego y ha recordado la acción en Einfach mal luppen.
Al final del encuentro todo quedó en un simple encontronazo entre dos jugadores dispuestos a defender la camiseta que visten esta temporada. Un abrazo junto a una breve charla y el césped del Sanchez Pizjuán presenciaba como ambos jugadores enterraba el hacha de guerra. Por suerte, la cosa no se puso divertida como preveía Kroos y ambos están disponibles para la siguiente jornada de La Liga.
